Como maquilladores muchas veces hemos hecho y visto fotos del antes y el después de nuestros modelos y clientes para evaluar cómo resultó el maquillaje realizado, pero ¿te has dado cuenta de cómo cambia su actitud? ¿Cómo se ven y se sienten mucho más seguros y contentos? Solemos ver el maquillaje y el cuidado de nuestra piel como un acto de vanidad, pero tengo la fiel creencia de que va mucho más allá.
El maquillaje me da más confianza:
Hace algunos días tuve una entrevista de trabajo, y antes de esta dediqué un tiempo para hacerme mi rutina de skincare y maquillarme.
Una vez estuve lista, me miré al espejo y sentí confianza y seguridad, sentí que lo iba a lograr. En ese momento caí en cuenta de que antes de arreglarme también me sentía linda y segura, tenía exactamente las mismas capacidades, habilidades y el mismo objetivo, pero después de quedar lista, me sentía poderosa, me sentía confiada en mis habilidades y sobre lo que iba a hacer.
Fue un momento de amor propio, me di cuenta de que con o sin maquillaje me quería y me sentía bien conmigo misma, sin embargo, por alguna razón, después de arreglarme me sentía aún más preparada para enfrentar el desafío que venía.
Estudios han demostrado que un 85% de las mujeres que usan maquillaje piensan que les ayuda a mejorar su ánimo en un mal día. Esto nos muestra que el maquillaje, el cuidado de la piel, y todo aquello que hacemos con el objetivo de “vernos más bonitos”, sin darnos cuenta, es y significa mucho más que eso. El momento que dedicamos a cuidar nuestra piel y a maquillarnos logra convertirse en una terapia, en un momento de meditación, de relajación, y muchas veces sin siquiera darnos cuenta de lo que en realidad está significando.
También es un momento de amor propio, pues somos capaces de identificar tanto lo que nos gusta como lo que no, y aprendemos a aceptarnos tal y como somos. Y es que eso es el amor propio, no es creer que somos perfectos, por el contrario, es aceptar cada parte de nosotros, nos guste o no, aprendiendo a respetarla e incluso, a quererla.
El maquillaje nos hace ser más creativos, nos hace ser más sociables, nos hace sentir más competentes e incluso, logra inspirarnos. Cuando tenemos maquillaje indudablemente nos sentimos más seguros, y no es cuestión de inseguridad, es cuestión de que nos hemos dedicado un momento de nuestras rutinas para consentirnos y arreglarnos, y es allí, con nuestro skincare y maquillaje listo, cuando estamos dispuestos para comenzar nuestro día y labores, preparados para enfrentar cualquier situación.
Sin darnos cuenta, el maquillaje logra potenciar toda la belleza, tanto interna como externa, que hay en nosotros.
¿Y tú? ¿Te has dado cuenta cómo cambia tu actitud y tu ánimo después de hacer tu rutina de skincare y maquillarte?
Autor:
Soy Liz Abella, tengo 19 años y soy maquilladora profesional egresada de VPRO MAKEUP CENTER. Para mi el maquillaje va mas allá del aspecto físico, para mi el maquillaje es un arte que potencializa nuestra belleza tanto externa como interna, y con ello optimiza a su vez todas nuestras habilidades y amor propio. ¡Los invito a seguirme en mis redes sociales! Y compartir conmigo el amor por el maquillaje.